«Penélope y las doce criadas», ¿novela? de Margaret Atwood

Otro libro (¿novela?) que me ha sorprendido. Últimamente lo consiguen casi todos. En esta ocasión, el primero que leo de Margaret Atwood me ha parecido todo un 'experimento', un intento de aportar originalidad a la forma en la que se narra una historia gracias, por ejemplo, a la utilización de dos narradores muy especiales:


  • Penélope, la mujer de Odiseo (el protagonista de La Odisea, de Homero), acompañada de sus criadas, habla después de muerta de lo que tuvo que hacer durante los veinte años que se ausentó su marido con motivo de la guerra de Troya.
  • Las criadas de Penélope, más que narran, cantan o recitan poesía en una suerte de contrapunto estético, y hacen dudar al lector acerca de lo que nos va contando su señora.

¿El experimento funciona? Es opinable. Para mí, quizás es uno de los pocos aspectos del libro que me ha empujado a continuar leyendo, ya que no he encontrado lo que podríamos llamar «la gran pregunta dramática», la intriga, el enigma que el lector pretende descifrar con la lectura. A falta de dicha intriga, si uno no tiene prisa y se deleita con el discurrir de las palabras y las frases, la lectura es agradecida y uno llega hasta el final como arrastrado por una imperceptible y agradable corriente. Al terminar la historia, uno se pregunta, ¿de qué iba, cuál era el tema? Y al no encontrar una respuesta clara, se responde, ¿qué importa?

No es un libro de una prosa sofisticada, más bien todo lo contrario, lo que no es nada fácil de conseguir; de ahí que, en esta ocasión no haya anotado un gran número de frases, 'solo' estas:

- ¿Por qué será que las personas muy guapas creen que los demás sólo existen para que ellas se diviertan?
- Hasta una mentira obvia sirve de cierto consuelo cuando no hay verdades que nos reconforten.
- Además, si un hombre se enorgullece de su habilidad para disfrazarse, es una tontería que su esposa le haga saber que lo ha reconocido: siempre es una imprudencia interponerse entre un hombre y el reflejo de su propia inteligencia.

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